El propietario del apartamento donde vive esta noruega (foto) le avisó el otro día de que va a poner fin al contrato, ya que va a arrendar los apartamentos a unos nuevos “refugiados”. Lo mismo sucede con otros 45 inquilinos. El propietario ha recibido el encargo de proporcionar vivienda a 150 nuevos refugiados que trae a Noruega la Oficina Nacional de Inmigración.

Se trata de una señora que vive de una pensión de invalidez. Cuando se lo dijeron estuvo llorando diez horas
No sé qué pensar, me parece todo una locura difícilmente creíble.
Evicted to Make Room for Asylum-Seekers
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No es este un caso aislado; el número creciente de “refugiados” pone a los ayuntamientos noruegos contra las cuerdas. La Oficina de Inmigración espera que lleguen a Noruega 15.000 refugiados este año. Comparativamente, sería como si en España llegaran 150.000. Hay que tener en cuenta que son “refugiados”, el país anfitrión tiene que darles alojamiento, todos los servicios sociales habituales, y una renta suficiente.
La oficina asigna los refugiados a los ayuntamientos, a los que da una subvención por cada refugiado. Para un número pequeño de refugiados esto podría ser suficiente, con semejante avalancha no lo es, ya que los ayuntamientos necesitan nuevas inversiones.
Esto es simplemente inaudito. En cualquier país sano se hubiera producido ya una revolución. El gobierno noruego es de una izquierda progre radical semejante al PSOE de zETA, con el agravante de que nadan en un mar de petróleo que les permite cualquier locura, incluida la destrucción de Noruega.
The Asylum Crisis in Norway