El gobierno de Pakistán, supuestamente un firme aliado del gobierno estadounidense en la Guerra contra el Terror, aunque menos fiel de lo que lo fue de los talibanes, ha acordado una tregua con los montañeses que protegen a bin Laden y el resto del núcleo de al-Qaeda. La noticia empezó con una entrevista que la cadena ABC hizo a un portavoz del ejército paquistaní y de la que se desprendía lo siguiente:
Osama Bin Laden, el hombre más buscado de América, no será perseguido en Pakistán si accede a llevar una “vida pacífica”, dijeron oficiales paquistaníes a ABC News.
El sorprendente anuncio llega a la vez que oficiales del ejército paquistaní anunciaron que retirarían sus tropas de Waziristán del norte como parte de un “tratado de paz” con los talibanes. […]
Además de la retirada de tropas paquistaníes, el “acuerdo de paz” entre Pakistán y los talibanes también incluye la devolución por parte de aquél de armas y prisioneros talibanes capturados.
“Lo que esto significa es que los talibanes y la cúpula de al-Qaeda han establecido un santuario dentro de Pakistán”, dijo el consultor de ABC News Richard Clarke, antiguo director antiterrorista de la Casa Blanca.
El acuerdo fue firmado el mismo día que el presidente Bush decía que los Estados Unidos están trabajando con sus aliados para “negar a los terroristas los enclaves que buscan para establecerse en zonas desgobernadas por todo el mundo”.
Sin duda Pakistán devuelve las armas capturadas a los talibanes para que no se sientan solitarios al llevar su nueva “vida pacífica”. Cuando el gobierno paquistaní vio el efecto de las declaraciones se apresuró a desmentirlas. El problema es que la entrevista está grabada.
Un portavoz del ejército paquistaní ha insistido en que las fuerzas gubernamentales arrestarán al líder de al-Qaeda Osama Bin Laden si lo encuentran en el país.
Los comentarios del general de división Shaukat Sultan llegan después de sus declaraciones a una cadena estadounidense diciendo que Bin Laden permanecería libre si se comportaba como “un ciudadano pacífico”.
Los términos del acuerdo se resumen a continuación:
Bajo el acuerdo, los montañeses prometen expulsar a militantes extrajeros y abandonar los ataques en territorio afgano a cambio de una presencia militar reducida.
Los montañeses han accedido a que los extranjeros que no se vayan tendrán que respetar el acuerdo de paz.
Es decir, que en el caso hipotético de que fueran a respetar el acuerdo, los terroristas podrían refugiarse en Pakistán siempre que temporalmente cesaran los ataques, lo cual efectivamente equivale a proporcionarles asilo. En cuanto a Bin Laden la transcripción de la entrevista es como sigue, dejando meridianamente claro que la primera interpretación de la noticia era la correcta:
ABC NEWS: Si Bin Laden o Zawahri estuvieran ahí, ¿se podrían quedar?
GENERAL SULTAN: Nadie de esa clase puede quedarse. Si alguien está ahí tendrá que rendirse, tendrá que vivir como un buen ciudadano, su paradero y viaje de salida serían conocidos por las autoridades.
ABC: ¿Así que no sería detenido? ¿Se quedaría allí?
G. S.: No, en tanto que alguien esté permaneciendo como un ciudadano pacífico, ese alguien no podría ser detenido. Tiene que permanecer como un ciudadano pacífico y no tiene permitido participar en ningún tipo de actividad terrorista.
A pesar de lo cual el general se ha quejado de que han citado sus palabras incorrectamente, pero no es así. Dijo, no muy claramente pero sí inequívocamente, que no se detendría a Bin Laden –en particular– si durante su estancia en Pakistán no participara en ataques.
En realidad esto no es nuevo, el general Musharraf ya declaró en una ocasión que esperaba que Bin Laden no fuera capturado en su país, a pesar de que es sabido que es allí donde se refugia. Los EEUU deberían despertar y dejar de creer que pueden estar aliados con países cuyos objetivos son opuestos a los suyos. Dos ejemplos son especialmente notorios y sangrantes, uno es el de Pakistán. El otro es el de Arabia Saudita, a la que los EEUU obsequian con relaciones privilegiadas a causa de sus ventas de petróleo y la falsa creencia de que es más razonable que otros países árabes o musulmanes, o a causa de la miopía que les impide ver que mediante estrategias a largo plazo persigue el mismo fin que Irán persigue mediante estrategias a corto plazo, en realidad menos peligrosas. Es un caso análogo al de los que en España creen que no se puede tratar con ERC pero sí con CiU. Arabia Saudita invierte sus petrodólares en la islamización de Occidente mientras el gobierno americano otorga al CAIR, cuyas relaciones con tramas terroristas son notorias, rango de representante oficial de los musulmanes americanos en detrimento de otras organizaciones menos criminales pero que no son respaldadas por Arabia Saudita.
Mientras tanto la Yihad también continúa en Sudán, y Annan, que está exultante, va a solucionarlo:
El secretario general de las Naciones Unidas Kofi Anna ha advertido a Sudán de que será responsable de cualquier empeoramiento de la crisis humanitaria en Darfur.
Annan dijo que la resistencia de Jartum a una fuerza de pacificación de la ONU está poniendo en peligro la asistencia humanitaria para unos tres millones de personas. […]
Un corresponsal de la BBC dijo que el lenguaje de Annan fue extraordinariamente contundente.
Efectivamente esto es lo más severo que Annan ha dicho al gobierno sudanés. Un gobierno que está asesinando él mismo a parte de sus súbditos, que ya ha exterminado a cientos de miles y ha desplazado a varios millones, los cuales tienen las opciones de emigrar o ser los siguientes en poner sus cadáveres a curtir en las cunetas, y Annan ignorando todo esto supone que la “crisis humanitaria” es una causa primera y acusando al gobierno de no facilitar la llegada de ayuda humanitaria a quienes en realidad está exterminando activamente. Y esto por supuesto para quedar bien y a continuación volver a olvidarse del tema, acerca del cual la ONU no ha hecho nada durante estos años. Es el mejor autorretrato de la ONU.
Por cierto, en el propio Sudán un periodista ha sido decapitado. Despreciado sea el que piense mal, esto no tiene nada que ver con la Religión de la Paz. No, no, no, no, no. Que no. Con ésa no, con el Islam:
El cuerpo decapitado del editor de un periódico sudanés ha sido hallado en las afueras de la capital, Jartum.
Mohammed Taha dirigía el diario al-Wifaq y fue secuestrado en su casa la noche del martes por un grupo desconocido de hombres armados.
El año pasado había sido juzgado por blasfemia […]
Publicado en paralelo en DOCE DOCE.